Editado por la UANL y compilado por la escritora Elma Correa, ha salido el libro Ni una sola palabra, dedicado a Paulina y a “nuestra educación sentimental”.
Ciudad de México, 30 de noviembre (MaremotoM).- “Nuestra educación sentimental proviene, en gran medida, de la banda sonora de la época en que crecimos, incluso si no somos particularmente fans de la que suena a nuestro alrededor. Podemos cuestionarlo, negarlo, rechazarlo, pero cuando ese soundtrack se extiende por décadas, se convierte en parte de lo que somos.
Ni una sola palabra es una celebración de esa música de fondo que va cobrando relevancia a medida que maduramos y entendemos que no hay tal cosa como alta y baja cultura, solo productos culturales que nos gustan más que otros, que nos dicen más que otros. Ahí es donde aparece la figura de Paulina Rubio”.

Esa es la sinopsis del libro que acaba de sacar la Universidad Autónoma de Nuevo León y que se presentará mañana en la FIL. Se trata de veinte exploraciones que presentan a Pau en su esplendor, como el personaje sui generis de la cultura pop que es y como la artista que nos ha regalado canciones para amigarnos con desconocidos en los baños de las fiestas y para cantar a coro mientras cae nieve en Madrid.
Hemos entrevistado a la narradora Claudia Flores, que ha participado con su cuento “Apología”, en este libro magnífico, cuya ilustre compiladora fue Elma Correa.
“Apología” se trata de que todas las chicas rubias mexicanas quisieron ser en algún momento de su niñez Paulina Rubio, en ese sentido, Claudia Flores, que firma como Zeth Arrellano, cree que la artista tiene todavía mucho éxito y que este libro comenzó como un juego. Había una canción de Paulina y todos las cantaban. De pronto, dijeron que tenían que escribir sobre la cantante y fue Elma Correa la que dijo que había que hacer el libro.
“Empezó como una convocatoria entre amigos y hay otros de Baja California”, dice Claudia, en un conjunto donde hay varios poetas como Fanny Enrigue y Yolanda Segura y varios narradores, como César Tejeda y Ana Fuente.
La portada está realizada por Ale Librada Torre Salcedo (1985-2020), fallecido el año pasado a causa del Covid.
“Paulina Rubio abarca todos los extremos de las emociones. Hay cuentos que son muy graciosos y hay otros que son muy densos. Siento que abarca un poco de todo. La comunidad LGTB está ligada a este ícono y a muchas veces la levantan como estandarte”, dice Zeth Arellano/Claudia Flores.

“Su brillantina y el dorado representan también un poco de drama y creo que es eso lo que le llama tanto la atención a la comunidad LGTB. La rivalidad que separa a Paulina Rubio de Thalía está también plasmada en ciertos cuentos”, agrega.
“La imagen de Paulina Rubio es tan popular que todos sabemos movernos con su música. Ni una sola palabra es la más icónica de todas. Que Elma Correa haya decidido hacer esta antología y que la UANL decida publicarlo es fantástico”, concluye esta narradora, que por ahora se ha volcado a los cuentos y que trabaja mucho en la literatura, desde sus comentarios en el Canal 4 y MaremotoM y siempre se pregunta: ¿Qué hacen las personas que no leen libros?