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La etimología de nombres de animales mostrada de manera sencilla y didáctica. Explicaciones acompañadas de maravillosas ilustraciones. Ideal para aprender con la historia de los nombres de los animales.

Ciudad de México, 13 de julio (MaremotoM).- Un tigre se asoma por la portada de Los nombres de los animales (Hueders niños), escrito por Jazmina Barrera e ilustrado por Rachel Levit Ruiz, una iniciativa que a la autora se le ocurrió hace bastante y encontró en la editorial chilena un gran refugio para su proyecto.

Los nombres de los animales surgen de historias extrañas, de mitos asombrosos, de exploradores intrépidos y equivocaciones divertidas. Y muchas veces ese nombre refleja las características del propio animal: el nombre del hipopótamo, por ejemplo, viene de la palabra griega híppos (que quiere decir caballo) y potámios (que significa río). Y el significado de tigre se remonta a las palabras flecha y agudo, dos características que distinguen al misterioso felino a rayas.

Con este libro podrás remontarte a los orígenes de las civilizaciones y descubrir los nombres de los mamíferos, peces, reptiles y aves maravillosamente ilustrados, en páginas por las que todo el tiempo se filtra la sorpresa, el humor y la sabiduría.

Jazmina Barrera nació en Ciudad de México en 1988 y ha publicado Cuaderno de faros (Montacerdos) y Línea negra (Almadía).

“Es un libro que empecé a escribir hace más o menos tres años y que se me ocurrió un día para algo que estaba escribiendo, buscar la etimología de un animal que estaba narrando. Siempre me abre la imaginación, la curiosidad, me lleva a evocaciones distintas, a planos de sentidos que no se me habían ocurrido. Tengo a una madre que le encantan las etimologías”, dice Jazmina Barrera, explicando su libro.

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“Tuve clases de etimología como muchos niños de mi adolescencia. Era muy mala y eso es una pena porque las etimologías son historias fantásticas detrás de las palabras que usamos todos los días”, agrega.

Un libro para chicos y para grandes. Foto: Cortesía

La idea del libro fue devolverles a las palabras ese pasado que trae consigo, para que los niños vayan agarrando este amor por el lenguaje, la etimología, la lingüística y los animales.

“Me encantan los animales, porque además vivimos en un momento donde la tierra y la relación con los seres humanos está muy deteriorada”, afirma.

Estamos separados por la naturaleza y a veces ni siquiera sabemos que estamos dentro de la naturaleza.

“Los nombres de los animales recupera un poco ese vínculo cultural y afectivo que tenemos con las cosas naturales. Los animales se vuelvan sujetos y dejen de ser objetos”, dice la autora de un libro que trae maravillas, como “animal de río” o “la bailarina de Tarento” o “Colorado”.

“Los fui descubriendo, me di a la tarea de investigar a los animales que tuvieran el nombre divertido, con historias asombrosas, descubrir esas historias ocultas era mi tarea y fue muy grato”, expresa Barrera.

Recuperar el vínculo con las cosas naturales. Foto: Cortesía

El editor es Rafael López, la ilustradora es Rachel Levit Ruiz, en un libro que “salió muy bien”, admite Jazmina.

Mucha madre, de Almadía, también es un libro en el que ha participado Jazmina Barrera, quien con Línea Negra ha comenzado a hablar de la madre disidente, de esas historias que las mujeres tienen con la maternidad.

“Este libro me parece fabuloso porque aporta de acabar con la idea monolítica de la maternidad universal y encarar las diversas maternidades”, concluye.

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